Fuerte respaldo del FMI y el G20 a la oferta argentina por la deuda

Jueves 9 de julio de 2020
La oferta argentina por la renegociación de la deuda, además de tener un amplio apoyo de los gobernadores, también contó con un fuerte respaldo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y los países miembro del G-20 y el Club de París. El patrocinio se efectuó en el marco de la reunión ministerial “Enfrentando a las crisis del Covid-19” organizada por Arabia Saudita, que tuvo la participación del ministro de Economía, Martín Guzmán.
En el encuentro virtual, la titular del FMI, Kristalina Georgieva, lanzó un nuevo y fuerte apoyo a la Argentina por la renegociación de la deuda e instó a los acreedores privados a contribuir con el proceso de reestructuración tras la nueva propuesta que presentó el gobierno nacional el lunes. 
“Los acreedores privados tienen que ver este como un momento de acción, ver cómo los acreedores y el país pueden unirse. Y eso es lo que tenemos que buscar: colaboración entre acreedores y deudores de una manera racional y mutuamente respetuosa. El Banco Mundial y nosotros haremos nuestra parte por la transparencia de la deuda y por una prudente reestructuración de la deuda”, afirmó Georgieva. 
La oferta argentina tuvo respaldo en otras intervenciones que se efectuaron durante la conferencia. Al momento de la inauguración del evento, el ministro de finanzas de Arabia Saudita, Mohamed Al Jadaam manifestó: “Es necesario reestructurar la deuda soberana de manera sostenible, con la participación de los acreedores del sector privado. Un ejemplo de esto es el caso de Argentina. Y yo alentaría a los titulares privados de su deuda a considerar esto realmente de manera positiva”. 
El funcionario extranjero, que fue uno de los más enfáticos en respaldar para la propuesta argentina, señaló que, en medio del contexto por la crisis que suscitó el avance del coronavirus en el mundo, “también es un buen momento para alentar a los acreedores del sector privado, en general, a participar en estos esfuerzos llevados a cabo por los países más vulnerables”.
Por su parte, el director de Comunicación del FMI, Gerry Rice, sostuvo que “la oferta revisada por las autoridades argentinas es un paso importante en el proceso de reestructuración de la deuda con sus acreedores privados. Esperamos que todas las partes involucradas continúen trabajando de manera constructiva y oportuna con el objetivo de llegar a un acuerdo que coloque la deuda pública en un camino sostenible y establezca las bases para un crecimiento inclusivo y duradero en el futuro del país”. 
Al momento de la exposición, David Malpass, director del Banco Mundial (BM), expresó que “los acreedores privados del sector público también deben involucrarse”.
Arturo Herrera Gutiérrez, ministro de Economía de México, adhirió al respaldo efectuado por Mohammed y Georgieva, “deseando un rápido y sensible acuerdo entre la Argentina y sus acreedores”. 
Los respaldos por parte de las principales entidades financieras del mundo se produjeron luego de que la Argentina completará el martes la formalización de su oferta para reestructurar su deuda de 65.000 millones de dólares ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), que también fue publicado en el Boletín Oficial.
Se trató de una enmienda “final” al prospecto de la propuesta que fue presentada el 21 de abril, que contiene mejoras y la letra chica del canje de deuda, que fueron anunciados por el gobierno nacional el domingo. La nueva oferta presenta una mejora en el valor económico, a la vez, acepta parte de algunos pedidos legales solicitados por los acreedores. 
Según se detalló, el valor de la oferta que estima el mercado tiene un importe de recupero que va desde los 53 a los 59 dólares, por lámina de 100 dólares de deuda de títulos a canjear, dependiendo de los bonos. Entre las mejoras para los acreedores, se había decidido que los bonos del canje 2005 y 2010 serán canjeados por otros títulos que mantendrán las mismas cláusulas de acción colectiva, en caso de un eventual incumplimiento. 
Tras conocerse la propuesta y el respaldo de los principales organismos mundiales, dos grandes fondos se pronunciaron favorablemente a la oferta, Gramercy y Fintech, del grupo más dialoguista con el gobierno nacional al frente de la renegociación. 
La nueva oferta vence el 4 de agosto, y la operación se completará con la entrega de los nuevos bonos el 4 de septiembre. 

Dos grupos rechazaron la propuesta

Los grupos Ad Hoc y Exchange rechazaron ayer la oferta de canje de 66.200 millones de dólares de deuda externa que formalizó el Ejecutivo el martes ante la Comisión de Valores de los Estados Unidos. Empero, estos agrupamientos de bonistas, encabezados por BlackRock y Monarch respectivamente, aclararon que la propuesta “va en la dirección correcta”. “No alcanza una propuesta que pueda ser apoyada por los acreedores más importantes de Argentina. Ni el grupo Ad Hoc Bondholder ni el Grupo Exchange Bondholder fueron consultados sobre los términos de la propuesta”, señalaron en un comunicado en conjunto los dos comités. “Si bien no aceptamos la última propuesta de Argentina, es alentador proporcionar una base para un compromiso constructivo. Estamos preparados para entablar debates sobre modificaciones que puedan lograr una reestructuración consensuada, y creemos que todavía es posible un camino hacia la resolución completa de los problemas restantes”, añadieron.


Guzmán dio por cerrada la oferta a los acreedores

El ministro de Economía, Martín Guzmán, sostuvo que Argentina no tiene más margen para mejorar la última propuesta de reestructuración de deuda que presentó días atrás a los acreedores.
“Hicimos nuestro máximo esfuerzo”, aseguró el funcionario nacional a Reuters en una entrevista, y agregó que “claramente no había espacio para mejorar más las condiciones de reestructuración de la deuda”. 
Luego agregó: “Si hay un país que conoce lo nocivo que son los descalces de moneda es Argentina. De hecho, ahora estamos haciendo nuestros máximos esfuerzos para reestructurar la deuda en moneda extranjera luego de un sendero de endeudamiento a partir de 2016 que terminó mal”. 
En cuanto a los efectos económicos que generó la pandemia en el mundo y en el país, consideró que “es fundamental evitar aumentos de la pobreza y de la indigencia, al mismo tiempo, evitar la destrucción de las capacidades de las personas y de las empresas. Y las medidas que hemos implementado en el país tiene que ver con esos objetivos”. 
En este sentido, explicó los alcances de la negociación y presentación que realizó el país. Entre otras cosas, implicó una reducción en la quita de capital, que sería de apenas el 3%, el reconocimiento de intereses devengados hasta el 31 de agosto de 2020 para los bonistas adherentes a la propuesta, con un período de gracia de sólo un año.
Las modificaciones que realizó el país fueron recibidas con optimismo por parte del mercado, que se reflejó en un fuerte incremento en el importe de los bonos soberanos en los últimos días, y en la suba de las acciones argentinas en el país.