Gimnasios abrieron con expectativas después de tres meses de inactividad

Después de tres meses de inactividad e incertidumbre volvieron a abrir los gimnasios en Posadas y algunas localidades de Misiones, de 8 a 20, teniendo en cuenta numerosas normas sanitarias para evitar contagios. El protocolo establece turnos, mientras que entre los propietarios consensuaron una cuota mínima de 1.500 pesos, una suma considerable si se tiene en cuenta que antes de la cuarentena algunos cobraban 800 pesos.

El lunes fue el primer día de apertura de un gran número de gimnasios; no obstante, otros continúan acondicionando sus establecimientos y tratando de cumplir con todos los requerimientos para la habilitación.

“Estos meses sin abrir fueron muy duros. Tuvimos que vender catorce cintas, diez bicis de spinning, 500 kilos en disco, diez barras y algunas máquinas para poder pagar el alquiler y para otros gastos”, sostuvo María Laura Viveros, de Dynamic Gym.

La mujer destacó el interés de la gente en volver a ejercitarse y que aunque es un cupo muy acotado respecto a lo que era la normalidad antes de la pandemia, tienen personas en todas las horas, como se trata de un espacio amplio, ellos pueden albergar hasta 20 personas por turno.

Según establece el protocolo, quien vaya a ejercitarse debe llevar barbijo, su propia botella con agua y toalla; respetar la distancia de dos metros con el otro y la desinfección inmediata de la máquina usada. Antes de entrar se les debe tomar la temperatura y desinfectar los pies en una alfombra y las manos con alcohol en gel.

“La gente estaba desesperada por volver a entrenar, por ahora la mayoría de los que vinieron son hombres y lo que más se busca es hacer aeróbico para bajar algunos kilos que subieron en este tiempo”, señaló.

Respecto al precio de la cuota implementada, dijo que fueron muy pocos los clientes que se manifestaron en contra. “Estamos contentos y sorprendidos de cómo la gente respondió, así que esperemos que esto no retroceda”, cerró.

Por su parte, Esteban Clara, profesor de educación física y propietario de Zeus, que funciona en la capital provincial desde hace 22 años, también se mostró aliviado de poder volver a abrir su local.

“Recién estamos empezando, ayer (por el lunes) fue el primer día y lo que cuesta un poco es que la gente entienda que tiene que ocupar el espacio por zona”, expresó. No obstante, destacó la buena predisposición de los clientes en cumplir con todas las medidas dispuestas en el gimnasio.

Tanto en el local de Esteban como en el María Laura están señalizados con cinta los espacios en los que se puede circular y ocupar.

“Para poder salir adelante estos meses alquilamos bicicletas, caminadoras, pesas y por suerte me dieron el préstamo para monotributistas”, contó sobre estos meses en los que no pudo trabajar.