El Senasa investiga las extrañas muertes de las 10 ovejas sin sangre

Viernes 10 de septiembre de 2010

Agentes del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), se hicieron presentes en el campo en el que diez ovejas fueron atacadas mortalmente por algo que nadie se atreve a asegurar qué es, y que les produjo cortes precisos en sus cuellos y las dejó sin sangre en sus cuerpos.
El desconcierto del propietario del campo y de los animales, José Fraga, dijo ayer a El Territorio que hasta el momento “no se produjeron novedades, todo está igual, la Policía sigue colaborando con las guardias y que yo sepa no se denunció nada igual en otros campos”.
Es que desde hace poco más de una semana, en el campo de la sección novena de esta localidad, un extraño ser atacó en dos noches a una docena de animales, entre ovejas y vacas. En total, provocó la muerte de 10 ovejas y lastimó a dos más de ellas y a una vaca en sus ubres.

Los ataques del extraño animal, fueron precisos en la zona yugular, desde donde al parecer en pocos minutos les extrajo por completo la totalidad de la sangre a cada animal muerto.
Los agentes del Senasa revisaron a las ovejas que fueron atacadas pero que sobrevivieron a la furia silenciosa de quien algunos ya se atreven a decir que se trata del mítico Chupacabras, una especie de mutación animal o humanoide que empezó a ser conocido en tierras mexicanas y desde hace unos 10 años en varias provincias de la Argentina, como por ejemplo, en Salta.

 

Ratón carnívoro
En junio de 2002, un ratón carnívoro, el hocicudo rojizo, fue sindicado por entonces como el causante de las mutilaciones de los cadáveres de vacas aparecidas en los últimos meses en varios puntos de la Argentina, informó el Senasa y la Universidad Nacional del Centro. Incluso, se detalló que el ratón actuó junto con zorros y aves carroñeras.
Un informe del Servicio de Diagnóstico Veterinario Especializado (Sdve) del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), revelaba que las vacas que aparecieron mutiladas murieron por causas naturales y no por presuntas acciones de sectas o por fenómenos paranormales, como señalaban algunas versiones periodísticas.
“Los vacunos murieron por enfermedades, desnutrición y trastornos metabólicos, en tanto que fueron animales carroñeros los que extirparon parte de sus órganos o la sangre”, afirmaba el estudio del Sdve.
Según el informe del Senasa y la Universidad del Centro, los rastros del ratón carnívoro fueron hallados dentro de los cadáveres de las vacas e incluso fueron filmados.
El hallazgo de las reses con extrañas mutilaciones concertó el interés de los medios de comunicación, al tiempo que expertos en vida extraterrestre afirmaron que se trataría de investigaciones científicas de seres de otros planetas, mientras que también se sospechó de prácticas esotéricas o rituales de sectas.

 

Reina la confusión
En Campo Viera la confusión es total. Es que desde que empezaron a aparecer las ovejas muertas, el cielo sobre el campo de José Fraga se inundó de cuervos y caranchos, pero nunca se acercaron a la zona en donde fueron atacadas.
“Es como si algo los aleja de esa zona, porque en el resto del cuerpo sí comieron”, dijo el propio Fraga.
Además, el veterinario Arno Stockmanns, tras analizar los restos de los animales, opinó que el asesino “podría ser un cachorro de puma o yaguareté, pero no podemos descartar nada y todo es posible”.
“Incluso, el dueño de la chacra tomó fotos de unas huellas que encontró en el lugar y son muy parecidas a las del Chupacabras de México”, reconoció, poniendo más misterio a las muertes, cuando quizás muchos esperaban respuestas concretas.
El guión de lo que puede convertirse en una película de terror sumó un párrafo más inquietante todavía, reforzando sospechas sobre la zona en la que fueron atacadas las inocentes ovejas.
Es que se aseguró que cuando las hormigas ganaron lugar sobre los cadáveres de las ovejas, al llegar a la zona del cuello repentinamente murieron, no avanzaron más.
El miedo de los cuervos y la muerte instantánea de las hormigas, no hacen más que aumentar las sospechas sobre que o quien mató y disecó a las ovejas fue nada menos que un ser extraterrestre, posibilidad que ciertamente hasta el veterinario no la obvió y es más, la mencionó como probabilidad a tener en cuenta.
A pesar de que los cadáveres  de las ovejas ya son apenas cueros resecados en la tierra, en el cielo sobre la sección novena de Campo Viera siguen sobrevolando los cuervos y los caranchos, como esperando más muertes en la zona de los interrogantes y el misterio.

 

 

“Todavía no recibimos una denuncia”

Rodolfo Jaquet, especialista del Ministerio del Agro y la Producción, informó ayer a El Territorio que “aún no recibimos denuncia alguna sobre lo sucedido en Campo Viera, nosotros sabemos lo que pasó por las publicaciones de los medio de prensa, no fuimos al campo, pero de tener que intervenir lo haremos como lo hacemos cada vez que nos reportan la muerte de animales en manos de pumas o yaguaretés”.
“Yo creo que puede ser un puma o un yaguareté…, algún animal autóctono, pero pudo haber pasado muchísimas otras cosas. No puedo opinar porque no fui al campo ni vimos cómo quedaron los animales. Estamos esperando que exista una denuncia formal que venga mediante la intendencia de Campo Viera o de la Secretaría de la Producción que funciona en esa localidad…”.
Jaquet anticipó que les correspondería intervenir para certificar que las muertes fueron producto de ataques de algún animal depredador y que no hay o existen otro tipos de causas que puedan suponer de alguna enfermedad que pueda poner en peligro al resto de los animales de determinadas chacras o propiedades.

 

 

¿Mitología o realidad?

  • Al igual que los humanos, se sostiene sobre las extremidades inferiores. 
  • Casi todas las fuentes coinciden en que su altura está entre los 3 y los 5 metros.
  • Se desplaza caminando, según algunas versiones, volando al parecer de otros, o incluso podría hacerlo saltando al modo de los canguros.
  • En Costa Rica, sorpresa por el posible hallazgo de un esqueleto de Chupacabras. Pero tras ser  examinado, se dictaminó que se trataba de un perro.
  • En el año 1966 en Estados Unidos una entidad bautizada como “Mothman” (hombre polilla) se dejó ver, era una criatura grande con alas y ojos  rojos. Reapareció quizás 30 años después, como el Chupacabras.