No es casualidad que las plantaciones forestales se hayan incentivado en la región mesopotámica en las últimas décadas. Particularmente, el clima de la región es beneficioso para el crecimiento de árboles implantados con fines industriales. La ventaja climática se potencia en el caso de Misiones, que en algunas zonas muestra crecimientos récord sorprendentes frente al resto del mundo. En general, la edad adulta para el corte de un pino ronda los 18 años, según coinciden ingenieros forestales, y la misma especie demora más de 30 años en Europa.
Para el ingeniero forestal Miguel Ángel López el crecimiento acelerado de las especies forestales “es una de las fortalezas que tiene Misiones. El crecimiento de un pino y su uso depende de muchas variables, porque hay planes de corte que ya a los 11 años están haciendo tala rasa. Pero en general para fines maderables hay planes de manejo de 15,16 y 18 años”.
Remarcó que dependiendo de las proyecciones de la empresa a cargo de las plantaciones, “a los 11 años ya hay rollos que pueden ir a la industria del aserrado. Pero sin dudas Misiones tiene una gran ventaja en cuanto a condiciones que aceleran el crecimiento de las especies. En general hay una diferencia de 5 a 1, de 8 a 1. Es decir, lo que puede crecer aquí en 8 años en los países nórdicos demanda 40 años. Por esto en su momento la Mesopotamia se vio como un importante polo de desarrollo forestal mundial”.
Raleo, el primer corte forestal a los 5 años
Si bien el desarrollo pleno de un pino se logra cerca de los 18 años, en general casi todas las plantaciones recurren al raleo (corte de pinos en edad temprana) para ser utilizados por la industria celulósica. Esta práctica a su vez permite crecer mejor a las especies que quedan en la plantación, con mayor espacio para su desarrollo.
“Un raleo se está logrando en 5 años, hay casos en los que lo realizan en 4 años, y también hay algunas empresas que están haciendo lo que se denomina raleo perdido a los 3 años. El raleo perdido se hace para liberación de la masa arbórea, es su única utilidad. Pero en general un raleo comercial se hace a los 5 años, dependiendo de la densidad donde se plantó”, explicó el ingeniero forestal Éctor Belaber.