De niña jugaba en la colonia con la hija del médico

Domingo 7 de septiembre de 2014
Esquivel. | “No tenía ninguna compasión”.

Esther Esquivel tiene 72 años y actualmente vive en esta ciudad. Cuando tenía 9 años, junto a sus padres fue a vivir a la localidad de Lanusse. En esa colonia, en la escuela primaria, conoció a una niña rubia de ojos azules llamada Marion Dumbarg, quien fue la hija del médico del pueblo. Esther recuerda que el doctor Dumbarg era un hombre alto, fornido, de una mirada penetrante, poco sociable. “Era una persona que irradiaba respeto y temor”. Esther relató que este médico tenía una pequeña casa de madera, modesta. Con el correr del tiempo, había construido una pequeña pieza para atender a los pacientes.
“Era una especie de consultorio e internación”, describió. Según contó Esther, este galeno rara vez hablaba con la gente de la zona. “Era callado, para nada sociable, nunca supe de dónde vino, era un hombre que solía atender a la gente, estaba cuando se lo necesitaba, pero era muy violento con los lesionados”.
Para detallar con ejemplos sus dichos, indicó que “una vez, a un obrero, trabajando, se le cayó encima del brazo un rollo que se había escapado del camión, produciéndole una lesión grave. El médico lo llevo a su consultorio y recuerdo que ahí nomás le corto el brazo, produciéndole la muerte. Era muy bravo, no tenía compasión”.

En otra oportunidad, cuando una mujer estaba a punto de dar a luz, “le tironeó muy fuerte la placenta y también se murió; cosas así se solían escuchar”.
Sobre el comportamiento con su hija Marion, recordó Esther que el médico era “muy estricto, no la dejaba jugar con nadie, tampoco quería que comiera cosas de la chacra, como ser sandía o arroz. Ella quería jugar conmigo, siempre íbamos a casa, pero luego, cuando dejamos la escuela, nunca más supe de ella, porque el padre no la dejaba salir”.
Según esta vecina que ahora vive en el kilómetro 10 de Eldorado, Dumbarg hacía de médico clínico, cirujano y dentista. “La verdad que no sé si realmente era médico”, afirmó . Después de un tiempo, Dumbarg se separó de su mujer porque “tenía un comportamiento violento con ella, y luego se puso de novio con una mujer de Libertad”.