Nueva Fiat Strada, una pick up más segura y con nuevas aptitudes

Martes 1 de septiembre de 2020 | 22:45hs.
Misiones
Luego de varias mejoras continuas, después de dos décadas de su lanzamiento, en agosto de 1999, Fiat presentó la segunda generación de la pick up compacta Strada, una referente del mercado argentino que se mantuvo vigente. El vehículo ya está a la venta en nuestro país y fue renovada para ajustarse aún más a las necesidades de sus usuarios.

Este nuevo modelo se construye sobre la misma plataforma que utilizan otros modelos de la marca italiana. Es fácil reconocerla como una Fiat incluso si tuviera cubiertos sus logos. El logo que luce este modelo tiene las siglas Fiat en letras bien grandes, tanto adelante como atrás. Además, agrega un pequeño emblema con los colores de la bandera italiana.

Un aspecto que se revisó en esta nueva generación fue la seguridad. Todas las versiones, salvo la Endurance con cabina simple, ofrecen cuatro airbags: dos frontales y dos laterales. Todos los modelos tienen control de estabilidad, asistencia al arranque en pendiente y control de tracción con el sistema E-Locker, que otorga más fuerza (torque) a la rueda con mayor agarre en el suelo cuando la situación lo requiere.

A lo que normalmente se le llama cabina simple, en la nueva Strada sería una cabina y media, con espacio detrás de los asientos para dejar algunos elementos. La marca italiana decidió llamarla “Cabina Plus” y sólo está disponible con la versión de entrada de gama. Desde ahora sí tiene una verdadera opción de doble cabina con cuatro puertas, lo que la hace bastante más cómoda y práctica.

La nueva Fiat Strada cambió la configuración de todo el sistema de suspensión que le permitió mejorar la capacidad de carga, que ahora es de 720 kilos para la versión de caja simple y de 650 kilos para las de cabina doble.

Por otro lado, las puertas traseras no son muy grandes pero sí cuentan con un ángulo de apertura muy generoso (80°), lo que facilita en ingreso.

Sin embargo, cualquier persona de más de 1,80 metros de largo, deberá viajar con las piernas abiertas para lograr una postura relativamente cómoda. Dos pasajeros así anulan la posibilidad de que alguien viaje en la plaza central.