Para el año que viene entre el 40% y el 70% del mundo habrá tenido coronavirus

Miércoles 26 de febrero de 2020 | 11:00hs.
Una foto tomada en Tokio, el 20 de febrero pasado, donde la gente se protege por los posibles contagios | Foto: AP
El coronavirus chino, conocido científicamente como el COVID19, no para en su escalada mundial de contagios. América del Sur, que era el único continente a salvo de infecciones, ya tiene casos sospechosos y hasta uno confirmado, en Brasil. El crecimiento exponencial de los contagios, a lo largo del mundo, preocupa a las autoridades sanitarias de todos los países, sobre todo porque aún no hay un tratamiento específico para esta enfermedad que a esta altura se cobró 2.785 vidas, con más de 80.00 infectados.

El coronavirus, a diferencias de otras enfermedades, es particularmente peligroso porque puede no causar ningún síntoma en muchos portadores. Esto hace que la posibilidad de que se convierta en una pandemia global son muy altas. Así lo advirtió Marc Lipsitch, profesor y epidemiólogo de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard, quien señala que los actuales niveles de contagio son solo la punta del iceberg. Lipsitch pronosticó recientemente que en tan solo un año, entre el 40% y 70% de la población mundial se infectarán con el virus que causa COVID19.


Hay que aclarar que por el comportamiento de la enfermedad, no todos los casos de infección son graves. Según el mismo profesional, más del 80% de los infectados ni siquiera se darán cuenta de que portan la enfermedad, y la inmensa mayoría de los restantes solo tendrán síntomas leves.

Al inicio de esta semana la Organización Mundial de la Salud se expresó en términos similares a los de Lipsitch, pidiendo al mundo que se prepare para una “potencial pandemia”. Desde el principio, los epidemiólogos avisaron que la aparición de una nueva enfermedad abría varios escenarios: el mejor era que se lograra controlar el foco de Wuhan y la provincia de Hubei; y el peor que el virus se transformara en una nueva enfermedad estacional, un coronavirus endémico, una “nueva gripe”.

En estas condiciones, más peligroso que el virus mismo es lo que genera en la ciudadanía. El virus se expandió y ya se cobra vidas en Francia e Italia, donde la psicosis pública que llevó a que en varias de las zonas afectadas se produjeran desabastecimientos en los mercados por la desesperación de los vecinos por hacerse de alimentos para esperar, encerrados en cuarentena, la evolución de los casos en la zona.