Reemplazaron al jefe de Policía de Misiones

Domingo 26 de febrero de 2012

El comisario general Héctor Jorge Munaretto, quien estaba en situación de retiro, fue designado anoche como nuevo Jefe de la Policía de la Provincia de Misiones, por Decreto Nº 150/12 del Poder Ejecutivo Provincial. La resolución se conoció pasada las 22. El gobernador Maurice Closs fue quien designó a Munaretto como nuevo Jefe de la Policía de la Provincia de Misiones, en reemplazo de Benjamín Roa.
El ahora ex titular de la repartición fue notificado de tal situación apenas firmado el correspondiente decreto, según reconoció el propio Roa, quien fue pasado a retiro obligatorio tal como lo estipula la remoción del cargo que ocupaba.
A esta resolución se sumó el llamado de la reserva policial, representado por retirados y jubilados para cumplir las funciones de los policías que mantienen la huelga en reclamo salarial desde el último martes.

Munaretto se retiró de la fuerza como comisario general, y se desempeñaba en la subsecretaría Seguridad y Justicia de Misiones, en el cargo de director General de Geguridad y Política Criminal, en el que fue designado por el Decreto    Nº 178/2011.
Dentro de la Policía  se desempeño en el área de informática y en la de inteligencia, en donde se terminó jubilando en 2010.
Es un hombre cercano al actual sub jefe de la Policía, Víctor Rutschman, con quien fue compañero de promoción en la Escuela de Cadetes de la fuerza, de la que egresaron en 1983 para incorporarse a la fuerza que desde ayer conduce Munaretto, secundado por el mencionado Rutschman.
La primer actividad oficial del nuevo jefe de la fuerza, según trascendidos, sería una reunión con los jefes de las Unidades Regionales, que se desarrollaría en horas del mediodía de hoy.
En tanto que el resto de los cargos de la plana mayor de la Policía de Misiones se mantienen sin modificaciones, hasta el momento.

 

Gendarmes hacen de policías
Por otra parte, a raíz del autoacuartelamiento, desde ayer los efectivos de la Gendarmería Nacional que cumplen tareas en Misiones, están en Posadas afectados a las tareas de seguridad que eran responsabilidad de la Policía de Misiones. La Gendarmería realiza tareas de seguridad en plazas y edificios públicos, es así que se pudo ver en la jornada efectivos de esa fuerza nacional vigilando la Casa de Gobierno y la zona de bancos, en el microcentro capitalino.
 La fuerza nacional dispuso para este operativo de cobertura de tareas de la policía, a los efectivos que tiene a disposición en Misiones, sin que por el momento llegaran refuerzos desde Buenos Aires, algo que desde la propia Gendarmería ven como improbable.
En Posadas hay más de un centenar de gendarmes cumpliendo misiones de policías.
Entre las tareas que debieron encarar ayer los gendarmes estuvieron las actuaciones por la muerte de un joven en el barrio A-4 de Posadas (Págs. 38 y 39), donde además de resguardar la zona, debieron desempeñarse en detenciones e investigaciones.

 

Cansados pero acostumbrados
Mientras tanto, los policías autoacuartelados en Posadas y el resto de la provincia (Pág. 6) continúan con las manifestaciones. Ayer por la tarde, al grito de: “Aguantamos. Estamos cansados, pero acostumbrados” los manifestantes mantenían el campamento en las puertas del Comando Radioeléctrico de Posadas, en la avenida Uruguay esquina Félix Bogado, donde la protesta tiene su epicentro.
En el lugar el convencimiento del reclamo es férreo y la postura es rígida, como la de los primeros días.
“Todos los puntos o nada”, sostenían por altoparlante en medio de cánticos y arengas en las que se saludaba a cada delegación de policías que llegaba del interior, como también a otros sectores que mostraron su adhesión a la protesta, como los sindicatos judiciales y los de la Unión Tranviaria Automotor. El reclamo de un salario básico de 2.000 pesos sigue siendo el principal pedido de los autoacuartelados.
Por otra parte, también participaban de la manifestación los miembros del Servicio Penitenciario Provincial, que sumados al reclamo de la Policía, piden por mejoras salariales.

 

Predisposición al diálogo
El jefe de Gabinete de Misiones  Ricardo Escobar, además de ratificar la predisposición y voluntad del Gobierno en resolver la problemática planteada por los integrantes de la fuerza de seguridad de la provincia, indicó que “hay un grupo de efectivos que está de acuerdo con la propuesta salarial presentada”. Pero advirtió que “existe otro sector duro que no acepta porque está siendo fogoneado por sectores políticos y sindicales que no quieren que esto se resuelva”.
El funcionario no dejó de reconocer el genuino reclamo y el esfuerzo realizado por el Gobierno de la provincia para ofrecer una propuesta salarial, que aseguró fue bien recibida por muchos uniformados. Al llamar a la reflexión a los policías para que acepten la propuesta salarial, indicó que se seguirá en la senda del diálogo.
Por su lado, el ministro de Desarrollo Social, Joaquín Losada, resaltó la importante oferta salarial realizado por el Gobierno, al sostener que “supera ampliamente la paritaria nacional, que es la discusión de los salarios nacionales y se ha duplicado lo que es la media nacional”.

 

 

Un conflicto con tres propuestas salariales

 

POSADAS. Apenas iniciado el acuartelamiento policial, los manifestantes distribuyeron los puntos de reclamos: un salario básico de 2.000 pesos respetando los actuales adicionales.  Descongelamiento del pago de la antigüedad. Entrega de uniformes y elementos necesarios para el trabajo. La autorización para crear un sindicato del sector policial. La no sanción al personal que ha participado en la protesta. La reincorporación del personal pasado a disponibilidad por gestionar la creación del sindicato policial.

 

Primera respuesta oficial
Las negociaciones dieron comienzo desde el inicio de la protesta, aunque tuvieron un avance más formal en horas del mediodía del miércoles. Se ofreció elevar el salario del policía, en igual porcentaje  establecido en paritarias. Fue la primera propuesta rechazada.

 

Segunda oferta
El vicegobernador Hugo Passalacqua y el ministro Jorge Franco, dieron a conocer el jueves la segunda oferta salarial. Se propuso un aumento de haberes de bolsillo de un 27 por ciento. Se incluyó un 40 por ciento promedio al básico de cada sueldo a ser liquidado en dos tramos. El primero, según detalló Franco, de un 20 por ciento a concretarse a partir del acuerdo y otro 7 por ciento, en el mes de julio. “Esto representa una inversión en materia salarial de más de cien millones de pesos anuales”, sostuvo Franco. Esto implica además pasar de los 200 millones destinados a la masa salarial, a 300 millones por los porcentajes ofrecidos. El pedido de un básico de 2.000 pesos planteados por los manifestantes, el Gobierno lo había considerado inviable.

 

Tercera oferta oficial
Luego de una reunión de casi siete horas el pasado viernes, entre el Gobierno y los referentes de los policías autoacuartelados, terminó con la tercera oferta oficial. 
Franco detalló la propuesta salarial.
“El gobernador de la provincia (Maurice Closs) en persona tomó las decisiones de otorgar una reivindicación histórica para la Policía de Misiones, con una cifra que llega al 40 por ciento de aumento del salario”, indicó.
La propuesta consistía en un 30 por ciento de aumento, más una suma fija de 300 pesos para todos, con lo cual a la categoría más baja le significaría un 42 por ciento y a las categorías más alta entre un 39 a 40 por ciento de aumento.
Se añadió que un policía recién ingresado superaría los 3.500 pesos de sueldo.
De nuevo, en asamblea, hubo un no rotundo a la oferta salarial.

 

Lo que ya se aceptó
En cambio sí se aceptó la reincorporación de los siete policías cesanteados; que no exista represalias por esta protesta; una mesa permanente de diálogo con delegados de las unidades regionales; un fondo de siete millones de pesos desde el Iplyc para cubrir deudas de  policías, a devolver con el 0 por ciento de interés; y destrabar el cupo de los adicionales y los topes para las asignaciones familiares.

 

 

Tomaron la Unidad Regional Uno de Posadas

 

POSADAS. Cerca de la medianoche del viernes, varios de los policías auto-acuartelados se hicieron presentes en las instalaciones de la Unidad Regional Uno, en la intersección de las calles Córdoba y Félix de Azara, para ingresar y con posterioridad tomar el lugar.
Entraron al predio con la finalidad de tener un lugar donde pasar la noche, ya que en su totalidad pertenecían a dependencias policiales de las comunas del Interior.
Las escasas camas y catres dispuestos en el Comando Radioeléctrico no dieron abasto ante la multitud de los que estaban manifestando.
Todos los presentes destacaron que en ningún momento se produjeron hechos de violencia, ya que la toma fue pacífica.
Antes de ingresar al predio oficial, los movilizados informaron a los jefes presentes cuáles eran sus intenciones de pasar la noche allí, a lo cual accedieron las respectivas autoridades.
Además los movilizados cruzaron dos patrulleros en la citada esquina para impedir el tránsito vehicular. 
Una camioneta con tres efectivos pertenecientes a la Gendarmería Nacional custodia desde ayer la Residencia del Gobernador.
Además desde esa fuerza nacional ya se hicieron cargo en Posadas de la custodia de las entidades bancarias; así como venía ocurriendo en las localidades del interior de la provincia.

 

Las carencias
Mientras que sobre la avenida Uruguay, en su intersección con Félix Bogado, los más de mil uniformados se mantenían firmes en la protesta.
A pesar de la lluvia de la mañana, persistían apostados a ambos lados de la arteria posadeña, acompañados en todo momento por sus familias.
Varios destacaron algunas de las vicisitudes que deben padecer a diario en su labor policial, motivos por los cuales están alzando su voz.
Una de las más problemáticas se centra en el tiempo de uso de sus armas reglamentarias, muchas de las cuales tienen más de 35 o 40 años de constante utilidad. A lo anterior se les suma que deben padecer descuentos en sus ingresos mensuales por la adquisición de sus nuevos uniformes.
Otro ejemplificó que a pesar de haber ido a la universidad para obtener un título de grado su aguinaldo no supera los 650 pesos.
“Todos tenemos que hacer incontables adicionales para intentar sobrevivir, estamos abarrotados de trabajo sin poder ver a nuestras familias y los sueldos no nos alcanzan para nada”, esgrimió.
Mientras que un uniformado proveniente de San Antonio comentó que “mi señora tuvo que cocer por tercera vez la mochila de uno de nuestros hijos para intentar empezar las clases. No aguantamos más esta situación deplorable”.
Otro de las necesidades se centra en la falta de descongelamiento de la antigüedad, cuestión que fue prometida de solucionar por parte de las autoridades provinciales en el marco del presente conflicto.      
En relación con los bomberos de la tierra colorada destacaron que en innumerables ocasiones tienen que intentar combatir los incendios, tanto en Posadas como en el Interior, sin los elementos mínimos, tales como guantes, cascos, trajes antifuego, mangueras.
Lo mismo se replicó en los uniformados del Servicio Penitenciario Provincial, que tienen problemas no resueltos en lo referente a sus trabajos.  
Además dejaron entrever que muchos de sus colegas en el Interior no pudieron viajar a la Capital misionera porque sus respectivos jefes en la cadena de mando los obligaron a prestar los servicios.
“Nos aprietan mucho y además quieren crear divisiones internas para debilitar la lucha”, destacaron los uniformados.

 

 

En las comisarías del Interior se imponían  las guardias mínimas

Anoche desde el Gobierno indicaron que algunas localidades adhirieron al acuerdo salarial propuesto por las autoridades

 

CORRESPONSALÍAS. A pesar de la lluvia medio centenar de efectivos en actividad, retirados y familiares se congregó al filo de la tarde en el Centro Cívico para sostener el reclamo por un aumento salarial y mejoras laborales. Adelantaron que volverán a marchar mañana a partir de las 9.
Al mediodía, el titular de la URII, José Barboza, se reunió con los jefes de las dependencias y acordaron levantar la medida de fuerza “en desacuerdo con la metodología implementada en Posadas, donde faltan líderes y se incita a la violencia”. La versión oficial corrió como reguero de pólvora y enseguida se escucharon voces que desestimaron los dichos de Barboza.
“El personal de la URII sigue más unido que nunca en el reclamo. En las comisarías están los jefes y uno o dos oficiales, nada más. La adhesión supera el 80 por ciento”, comentaron en la movilización de la víspera. Aunque en horas de la noche desde el Gobierno indicaron que se había avanzado a un acuerdo salarial. Alba Posse, 25 de Mayo y zonas cercanas siguen la protesta con las guardias mínimas. Al igual que en la Capital de la Flores; donde cuatro agentes están en la Comisaría. Además se mantienen las  guardias en la Comisaría de la Mujer y en el Comando Radioeléctrico.
Ayer las puertas de la institución permanecieron cerradas, la mayoría del personal se encuentra acuartelado en el Comando Radioeléctrico de Eldorado, donde están todos los efectivos de la Unidad Regional 3 y otro tanto viajó a Posadas.
Adelantaron que si no hay resolución para el lunes, la totalidad de los efectivos se trasladarán a la Capital provincial.
Por otra parte, desde el sábado por la tarde se está desarrollando la Fiesta Provincial del Ternero y se vio poca seguridad en esta ocasión. En todas las ediciones de esta fiesta la Policía realizaba el control de tránsito en la Ruta Nacional 12 y el acceso al predio.
Según habían adelantado desde la organización, tendrían tratativas con Gendarmería Nacional para que realice dicho accionar; pero ello no se concretó ya que la ruta se encontraba sin controles.
En cuanto a lo que ocurre dentro del predio, todo está cubierto por empleados de la seguridad privada. Cabe destacar que la Policía también brinda servicios adicionales en los boliches, pero si la medida continúa ello también se verá afectado.
René Anders uno de los propietarios del local bailable Dejavú dijo que “apoyo la medida que tomó la Policía, se merecen un salario digno”. “Nosotros siempre contratamos a la Policía y seguridad privada. En esta oportunidad si continúan con la medida trabajaremos con seguridad privada. Una vez que la Policía siga con los servicios, vamos a seguir trabajando con ellos como siempre. Si bien nunca tuvimos disturbios, igualmente nos da más seguridad”, agregó. 

 

Adhesiones
En Puerto Iguazú sigue la protesta en el Comando Radioeléctrico. El viernes por la noche, tras recibir el comunicado de la falta de acuerdo desde Posadas, los efectivos, más dirigentes y personal afiliados a CTA y ATE, y familiares de los policías, realizaron una caravana de protesta, que inició su recorrido en la rotonda de acceso a la ciudad. Por su parte, el jefe de la Unidad Regional V, Miguel Bareiro afirmó estar involucrado en el reclamo policial.
 “No sé qué medida va a tomar el Gobierno, pero yo estoy con ustedes”, explicó el máximo responsable a sus agentes.
El comisario mantuvo una reunión con el Departamento Ejecutivo Municipal y pese al pedido de calmar a su tropa, Bareiro sigue firme junto a sus agentes. En un principio el comisario pidió que los efectivos “consideraran” la propuesta del Gobierno, y cómo recibió un rotundo “no” como respuesta del total de los policías afirmó “estar involucrado con ellos desde siempre”. Bareiro dijo comprender la situación de los agentes y aseguró “no sé qué medida va a tomar el Gobierno, pero yo estoy con ustedes, quiero una solución porque también es de beneficio para todos”; lo que provocó un aplauso general de los agentes que tienen tomado el Comando Radioeléctrico de esta ciudad. Pero también a última hora se habrían avanzado los acuerdos. Por la lluvia intensa que cayó ayer en la ciudad, se postergó el corte en el ingreso al Parque Nacional Iguazú.
Mientras que en Eldorado sigue  acuartelado el 50 por ciento de los policías. El comisario principal Alejo Bermúdez, se informó, está tratando de acercar a los efectivos y dándole a entender que es una propuesta interesante la que realizó el Gobierno. No hubo casi actividad nocturna en la Capital del Trabajo y los locales bailables decidieron no abrir sus puertas, por la falta de policías.
Mientras que en Apóstoles se mantenía el 80 por ciento de adhesión a la protesta. Anoche se concretaban una reunión para intentar acercar a las partes.

 

 

Los guardaparques también

Se confirmó que los guardaparques provinciales “tomaron” los Saltos del Moconá y procedieron a liberar la respectiva entrada. Esos trabajadores del Ministerio de Ecología, apostados en la jurisdicción de El Soberbio y zonas aledañas, se concentraron en el acceso a los saltos. Liberaron el cobro de entradas como forma de protesta por mejores salarios y condiciones laborales, apoyando a la movilización  de los policías misioneros.

 

 

Un sector de la Policía insiste con un aumento del 120 por ciento

Según el Gobierno, en Oberá, Aristóbulo del Valle, Iguazú y Jardín América aceptaron la propuesta y levantaron la protesta

 

POSADAS. El Gobierno Provincial ratificó ayer su oferta a la Policía de Misiones, al sostener que “es la mayor propuesta salarial a nivel país con un incremento del 40 por ciento para todos los niveles salariales de la Policía”.
De hecho, mediante un decreto se decidió liquidar el sueldo del mes de febrero con un aumento del 40 por ciento a los efectivos policiales que se presentaron a trabajar en sus distintas dependencias en los días del conflicto suscitado el martes pasado.
Respecto al impacto de este aumento salarial, sectores del Gobierno afirmaron que de esta manera un policía misionero que recién se inicia pasaría a ganar más que un policía correntino, chaqueño o formoseño; e inclusive más que un policía de la provincia de Buenos Aires.
A su vez, ante el rechazo a la propuesta, desde el Gobierno de Misiones se sostiene que “existen dos elementos que impiden un acuerdo. El primero de ellos es el condimento político donde se ve con claridad, e inclusive con clara identificación en sus remeras y gorros como de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) y el Sindicato de Camioneros, además de expresarse ayer la adhesión en la asamblea de los acuartelados”.
Añaden que “el segundo condimento es un estado de efervescencia que no le permite valorar en su real dimensión el extraordinario  aumento que se han propuesto”.

 

Intransigencia
Según lo planteado desde el Gobierno, al sostener la actual oferta salarial, “los 5.000 pesos que pretenden los manifestantes, significan un 120 por ciento de aumento, incremento que ni siquiera es planteado por los sectores más duros de la lucha gremial”.
Agregan que “este gobierno, ni el de ninguna provincia argentina, tiene los fondos para solventar semejante incremento con apenas un 20 por ciento de aumento en la recaudación”.

 

Intervención Federal
Además en la noche de ayer, según el Gobierno, “casi fuera de contexto, en el bunker de los sediciosos apareció la versión de una posible Intervención Federal. Sin saberlo esa amenaza se repitió varias veces en las terminales de radio del comando radioeléctrico, argumentando que la situación se resolvía con una intervención desde el Gobierno nacional, con la ilusa pretensión de que de esta manera obtendrían el 120 por ciento de aumento buscado”.

 

El bien común
Como lo hicieron público en los últimos días, insisten en que “la oferta del gobierno significa para las arcas del Estado un gasto de 150 millones de pesos al año que serán soportados a costa, seguramente, de una fuerte disminución de inversiones en otras áreas o generando nuevos ingresos”. También indicaron desde el Gobierno que “en ambos casos ya habrá sectores afectados que tendrán que pagar más impuestos o sectores que perderán su fuente de trabajo, unos 15 mil trabajadores en el caso de la construcción”.

 

El pedido
De acuerdo al Gobierno, “el pedido de 5.000 pesos para quien se inicia, duplicaría a 300 millones de pesos el gasto público anual y sólo podría cumplirlo con un enorme aumento en la presión fiscal o pulverizando la obra pública”.
Recordaron que “esta situación fue explicada, comprendida y aplaudida por los representantes de la mesa negociadora que se reunieron con el gobernador Maurice Closs y, ahora y por actitudes inexplicables desde todo punto de vista, esa propuesta fue rechazada”.

 

Nuevo jefe policial
A última hora de anoche, el gobernador Closs firmó el decreto número 150 de designación como Jefe de Policía del comisario general retirado Jorge Héctor Munaretto y convocó a las fuerzas de Reserva para que se incorporen al cuidado de la seguridad de la ciudadanía.
Además en otro decreto, decidió liquidar el sueldo del mes de febrero con un aumento del 40% a los efectivos policiales que se presentaron a trabajar en sus distintas dependencias en los días del conflicto.

 

 

Cronología de la huelga de la Policía de Misiones

 

POSADAS. Todo comenzó con un grupo reducido a última horas del martes, cuando se produjo el autoacuartelamiento concretado en la sede de la División del Comando Radioeléctrico I de Posadas, situada en la intersección de la avenida Uruguay y la calle Félix Bogado.
Las primeras dos horas fueron de puro nerviosismo, tanto de los manifestantes como de  integrantes de la Jefatura y autoridades judiciales que intentaban calmar los ánimos de todos los uniformados presentes.
Hasta alrededor de las 2 de la mañana del último miércoles, el juez de Instrucción Penal II de la Capital de Misiones, César Yaya,  permaneció en el lugar para intentar mediar entre las partes en conflicto.
A esa hora, mientras se retiraba del núcleo de la protesta a paso lento, reconoció que el conflicto no había sido descomprimido.
Alrededor de las 4:30 de manera oficial se había informado que “cinco policías” fueron los que “tomaron por la fuerza la División del Comando Radioeléctrico I de Posadas”, trabando la puerta de acceso y el portón de salida del lugar.
Pero, durante la mañana de ese día ya se habían sumando en promedio unos 700 efectivos, provenientes de diferentes localidades, tales como Cerro Azul, Oberá, San Vicente y Eldorado, entre otras.
Además mantenían inmovilizados a cerca de 50 autos oficiales, patrulleros y tres autobombas de los Bomberos.
También se sumaron, mediante similares medidas, los efectivos de Apóstoles y de Leandro N. Alem.
De esa manera comenzaba a profundizarse la protesta policial.
Los uniformados reclaman seis puntos básicos, entre los cuáles se incluye un sueldo básico de 2.000 pesos, siendo “el salario inicial básico de un policía de 147 pesos”, según Marcelo Rodríguez, abogado de los manifestantes.

 

Primeras consecuencias
El jueves, comenzaron a observarse los problemas en varias jurisdicciones por falta de efectivos para brindar, por ejemplo, seguridad a entidades financieras.
Los bancos Macro, Nación, Francés y Bisel, por falta de custodia policial, resolvieron no atender al público en Oberá.
En otras ciudades como Posadas, la custodia estuvo a cargo de los cadetes del tercer año de la Escuela de Policía.
Muchas comisarías que se fueron plegando no recibían las denuncias de los vecinos y en su mayoría trabajaban con mínima cantidad de personal, para mantener sólo las guardias.
También ese día se brindaba la segunda propuesta salarial.
De manera oficial se reconocía la adhesión del 50 por ciento de los uniformados y los manifestantes, sostenían que se habían plegado el 80 por ciento.

 

Suspensiones
Para el viernes y ayer se sumaron otros efectos derivados de la protesta. 
Mientras se difundían diversas suspensiones de eventos a lo largo de la provincia, la negociación entre las partes resultaba compleja por no tener los manifestantes referentes bien definidos, según el Gobierno Provincial.
Quienes representaban a los policías habían cerrado con aplausos el diálogo con las autoridades misioneras; aunque en forma posterior la postura de la mayoría sería distinta.
De forma unánime rechazaron la tercera oferta salarial en asamblea.
También el viernes ya se adherían integrantes del Servicio Penitenciario Provincial.

 

 

Por el paro preocupa la sensación de inseguridad

 

POSADAS. En una reunión del Movimiento Renovador Para la Victoria (Morevi) con sus máximos referentes y militantes auto-convocados se decidió por unanimidad respaldar la gestión del gobernador de la provincia, Maurice Closs, ante lo que se consideró “una actitud de rebeldía por parte de algunos integrantes de la fuerza de seguridad provincial y ratificar en su totalidad la propuesta realizada por el Poder Ejecutivo”.
Lo plantearon ante los hechos que son de público conocimiento.
Los firmantes fueron los máximos referentes del Morevi, encabezados por el intendente de Posadas, Orlando Franco; el defensor del Pueblo de Posadas, Marcelo Vairo; el subsecretario de Gobierno, Roberto Chas; el titular del Imas, Joaquín Sánchez; del Eprac, Timoteo Llera; el vicepresidente de Multimedios Sapem, Ricardo Welbach; y el secretario legislativo, Daniel Cáceres, entre otros.
Asimismo manifestaron su fuerte sospecha de que la protesta policial tiene “intereses políticos que exceden la cuestión del reclamo salarial”.
Allí resaltaron “la oferta histórica que hizo el Gobierno” en material salarial.
Recordaron que “alcanza el 30 por ciento de aumento más un fijo mensual de 300 pesos y lleva el sueldo de un agente que recién comienza de 2.400 pesos a 3.700 más adicionales”.
Indicaron que “fue rechazada sin siquiera ser analizada con la mesura que correspondía en el contexto realizado ya que pone a la Policía de la Provincia en condiciones salariales superiores a las otras policías provinciales de la región”.
Finalmente el Morevi planteó su preocupación ante el “corte de varios días sobre la Avenida Uruguay, acceso principal a la ciudad de Posadas”.
También los integrantes de esta agrupación indicaron “la sensación de inseguridad en la que está inmersa nuestra sociedad y que quedó reflejado en los lamentables incidentes del barrio A-4”.
Por ese motivo, señalaron, “se decidió permanecer en asamblea permanente en defensa de las instituciones de la democracia y reiterando que la cordura y la racionalidad prime en este conflicto”.

 

 

Repercusiones políticas del conflicto

Los referentes partidarios explicaron las posibles soluciones y analizaron las causas 

 

POSADAS. La clase política misionera no se mostró ajena a la situación que padecen los policías. encargados de la seguridad. 
Aunque varios se mostraron sorprendidos por la magnitud del hecho. Unos para apoyar la propuesta salarial y otros para  criticar la falta de resolución del conflicto y la forma de intentar destrabar la medida de fuerza que se inició el martes pasado. 
Desde el oficialismo tanto los ediles posadeños como los diputados provinciales del Frente Renovador apoyaron las negociaciones iniciadas por las autoridades provinciales.
En la oposición, como la UCR plantearon el blanqueo como una solución de fondo a este tipo de conflicto de estatales. Otros plantean otras formas necesarias de distribución de los recursos y hasta rescatan el gran esfuerzo que hacen los uniformados para cumplir sus tareas a lo largo de la Provincia, en especial en los lugares y parajes más alejados.

 

 

Referentes políticos de misiones opinan sobre la medida de fuerza de la policía

 

Luis Pastori
“Uno de los primeros proyectos de ley presentados como diputado consistió en una propuesta de Blanqueo y Dignificación del Salario del Empleado Público de los tres poderes del Estado, incluyendo a policías y docentes”. Afirmó que “desde la UCR creemos que el conflicto policial pudo haberse evitado si se hubiera dado la importancia que merecía la cuestión, cuando ya hubo un intento de agremiación en función del reclamo salarial, cuando hubo intentos abortados de acuartelamientos, y cuando tuvieron una reunión no muy trascendida con legisladores nacionales. Hoy, tardíamente, el Gobierno busca culpables”.

 

Mariano Díaz 
“Hace dos o tres años que vengo señalando que el problema de la provincia es social. Hay un Estado que ha visto incrementar su presupuesto en una forma muy significativa, tanto por una mayor recaudación provincial, pero sobre todo por fuertes incrementos de los dineros que envió la Nación. El problema sigue siendo cómo se distribuye ese dinero”. Dijo que “este florecimiento de policías  reclamando en forma pacífica por sus derechos  anime a otros ciudadanos a hacerlo, porque no son nada más que reclamos de estricta justicia social a los que todos los misioneros debemos acompañar”.

 

Héctor “Cacho” Nárbaro 
“El Partido Agrario y Social manifestó su solidaridad y acompañamiento para con los policías de la Pprovincia unidos en justo reclamo de recomposición salarial y reconocimiento al esfuerzo diario que implica garantizar la seguridad de los misioneros”.
En “el Interior la situación de agentes, suboficiales y oficiales es más precaria, la  falta de elementos básicos para el trabajo (móviles, combustible, repuestos, uniformes, papelería) se suma el aislamiento y la desazón por los bajísimos salarios, sin reconocimiento oficial de la importante tarea social que deben cumplir, excediendo sus funciones”, expresó.

 

Juan Manuel Irrazábal
El senador nacional por el distrito misionero del Frente Para la Victoria, Juan Manuel “Juanchi” Irrazábal, se mostró cauto a la hora de analizar el problema suscitado por la movilización de los policías. Aunque negó respaldar la génesis de la revuelta policial.
“Sería una irresponsabilidad como legislador politizar una cuestión meramente reivindicativa”, aseveró.
A la vez, mostró su “preocupación” como representante en el Congreso Nacional y como “misionero” y pidió “racionalidad” para solucionar el conflicto y garantizar la seguridad en Misiones. 

 

 

Los apoyos de legisladores y ediles oficialistas

Desde el bloque renovador destacaron que “ante los hechos que son de público conocimiento, los diputados renovadores manifestamos nuestra fuerte sospecha de que la protesta policial tiene intereses políticos que exceden la cuestión del reclamo salarial, ya que la oferta histórica que hizo el Gobierno, que alcanza el 40 por ciento de aumento, fue rechazada en forma irracional por el sector policial. La prueba de ello es que la logística y la provisión de alimentos de los auto-acuartelados, están a cargo de sectores sindicales como UTA y Camioneros, de reconocido tinte opositor al Gobierno de La Renovación. De esta manera especulan desestabilizar a un Gobierno que obtuvo el 75 por ciento de los votos habiendo obtenido un magro tres por ciento en las últimas elecciones”, dijeron.
Mientras que los concejales renovadores a través de su presidente José Moglia, junto a Magdalena Solari,titular del Concejo, destacaron que “frente a la difícil situación planteada por el conflicto generado en la Policía de la provincia, expresamos el apoyo al gobernador Maurice Closs”. Los ediles reconocen que el reclamo es justo, “pero no se puede desconocer el gran esfuerzo que significa la última propuesta del Gobierno para dar respuesta a las demandas”.