Mientras se aguarda la concreción del correspondiente juicio por el
hecho, hoy se cumplen cuatro años del crimen de Horacelia Génesis
Marasca (16), uno de los casos más cruentos registrados en los últimos
años en Misiones.
Fue un día como hoy pero de 2015 cuando Martín Monzón (37), ex
pareja de la adolescente, padre del bebé que nació producto de esa
relación y ahora único imputado por el caso, se presentó en la Comisaría
Séptima de Villa Cabello para realizar una exposición en la cual dejaba
asentado que su concubina había abandonado el hogar.
El hombre ni siquiera había llevado una foto de la adolescente,
como para ayudar o agilizar en la búsqueda de la muchacha, lo cual
despertó las primeras sospechas.
Poco después se fueron sumando más elementos que pusieron bajo la
lupa al sujeto, entre ellos una ampliación de denuncia realizada por
la madre de Horacelia, quien relató que su hija era víctima de
constantes hechos de violencia de género por el sospechoso.
En total fueron once días de completa angustia e incertidumbre que luego dieron paso al resquemor y la conmoción.
Es que atento a la cantidad de huecos en la versión de Monzón,
los pesquisas decidieron intervenir por sorpresa en la vivienda de la
pareja en la chacra 150 y allí comenzó a develarse el horror.
En la vivienda hallaron prendas con manchas de sangre y baldes con
lavandina. Eso derivó en la detención del sujeto y las posteriores
pericias de luminol terminaron confirmando la escena del crimen.
Acorralado por todo ello, el propio sujeto confesó que había
asesinado a la chica y descuartizado su cuerpo e indicó los puntos en
los cuales había descartado los restos en alcantarillas que desembocaban
en el arroyo Mártires.
Desde allí Monzón está detenido e imputado por homicidio calificado por la relación de pareja.
El expediente del caso está listo para ser esclarecido en debate
oral y público, pero existe un recurso de casación interpuesto que debe
resolverse antes.