Su ex le pegó a traición con un hierro y ahora teme por su vida

Martes 3 de diciembre de 2019 | 06:30hs.
Griselda recibió varios puntos en la cabeza y deberá hacerse más estudios. | Foto: Graciela González
Griselda Rush es de Montecarlo, tiene 43 años y hace algunos días decidió concluir su relación con Luis P. (31) después de distintos inconvenientes personales. Sin embargo, lo que pensaba iba a ser una separación en buenos términos días más tarde se convirtió en un calvario que casi termina en muerte.
Griselda se gana la vida realizando diferentes actividades: trabajos domésticos, vendiendo ropa y con la chacra. Alquila una casa en el barrio Industrial y desde hace un año aproximadamente convivía con Luis, a quien ahora denunció por un intento de femicidio que concluyó con varios puntos en su cabeza. 
Teme por su vida y por esta razón decidió hacer público su caso.

“Yo viajo una vez al mes a Buenos Aires a traer ropa para vender y cuando regreso me entero que estaba haciendo desmanes con mi moto, por lo que evalué la situación y dije que no podía ser así y tampoco quería problemas. Entonces le pedí un tiempo y que se mude a otro lugar. Me pidió una semana para llevar sus cosas;  hasta ahí estaban todos bien”, empezó contando en una entrevista con El Territorio.

Según la mujer, Luis nunca ejerció violencia de género sobre ella, pese a que había recibido advertencias por parte de varios conocidos. Describió a su ex pareja como un hombre callado e insistió que  nunca vivió ninguna “situación extraña”.

Pero ese concepto cambió totalmente el último fin de semana. “El viernes por la tarde cuando termino mis actividades vine a casa y él estaba tomando mate. Después vino una señora a pagarme y al rato se fue. De ahí fui a ajustar un tornillo del asiento de mi auto y en eso él me pregunta si quería ayuda”, desarrolló. 
Y siguió: “Ni bien terminó de decir eso siento que me pega en la cabeza con un hierro, por lo que caí sobre el asiento; me da otro golpe y se va encima mío  agarrándome el cuello, casi asfixiándose. Ahí reaccioné, dije ‘Dios por favor que no me mate’ y me soltó”.

“En eso me agarra, me arrastra y dice ‘vamos adentro (de la casa)”. Forcejeo con él, me agarra el cuello de nuevo y me tapa la boca para que no grite. Le mordí y con las pocas fuerza salí a la calle, donde me ayudaron  una vecina y su hijo. Él se escapó”, continuó la mujer, aún con las secuelas del violento ataque de su ex concubino.

Los vecinos llamaron a la Policía que hizo el recorrido correspondiente y la enviaron al hospital. Allí los profesionales médicos le hicieron varios puntos en la cabeza y además tiene escoriaciones y golpes en todo el cuerpo. Esta semana deberá hacerse estudios más complejos.

“Tengo miedo que me mate”

“Tengo miedo que venga y me mate. Decidí que sea público para que esto no le vuelva a pasar a ninguna mujer. Se comunicó conmigo su ex mujer y me dijo que ella también fue víctima de él y que a pesar de hacer la denuncia nunca le tomaron en serio”, amplió Griselda.

Según detallaron fuentes policiales consultadas por El Territorio el caso está siendo llevado adelante por las autoridades del Juzgado de Instrucción Uno de Eldorado, que dirige el juez Roberto Saldaña. Al tomar contacto con el caso ordenaron que se le notifique  la causa al acusado, además de una restricción de acercamiento y contacto con la víctima.

“Hasta donde sé -continuó Griselda- no está detenido. Yo quiero irme de acá, porque tengo miedo que un día aparezca y me mate. Porque Dios es grande no pudo matarme, no sé por qué hizo eso y porque tuvo esa reacción. Con mi pareja anterior viví violencia verbal, nunca llegamos a este punto, parecía que había entendido mi planteo de no querer seguir con la relación, nunca esperé esta reacción.”

Finalmente remarcó “hoy estoy viva y lo puedo contar, pero tengo miedo que aparezca y me quiera matar. No sé por qué no está detenido, tampoco me dieron una contención, o seguridad de que no va a acercarse de nuevo”.