Una mejor calidad de vida requiere una mirada profesional

Martes 5 de mayo de 2020 | 19:18hs.
Salir del trabajo y comprar lo primero que hay en el kiosco no es una opción. Una simple galletita dulce puede desencadenar un malestar desagradable y dolor abdominal en quienes sufren de celiaquía. La dieta cambia, la vida cambia.

Hoy se conmemora en todo el mundo el Día de la Enfermedad Celíaca, para concientizar sobre la importancia de que la población se realice los estudios pertinentes para detectar la enfermedad que afecta a una de cada cien personas en el mundo.

Según indicaron Guadalupe Luzuriaga, Diego Royg y Diego Sartori, gastroenterólogos del Instituto Higía, la Enfermedad Celíaca (EC) es una intolerancia permanente a ciertas proteínas del gluten, que se encuentra principalmente en el trigo, cebada, centeno, avena y sus derivados, presentándose en individuos con una determinada predisposición genética. Afecta principalmente al intestino delgado que es el encargado de la digestión y absorción de los nutrientes, vitaminas y minerales, desencadenando una serie de fenómenos inmunológicos que alteran la forma y función de las vellosidades del intestino, conocido como “atrofia”.

Prestar atención
El cuadro clínico es muy variable y puede presentar síntomas como no. La enfermedad puede presentarse con síntomas digestivos (diarrea crónica, pérdida de peso, distensión abdominal, náuseas, vómitos, reflujo gastroesofágico, cansancio), síntomas extradigestivos (falta del crecimiento o irritabilidad en los niños, caída del cabello, defectos en el esmalte dentario, aftas orales, cefalea, epilepsia, baja estatura, ansiedad, depresión), anemia, osteopenia, osteoporosis, fracturas, trastornos ginecológicos, lesiones en piel, alteración en análisis de laboratorio (como aumento del valor de las enzimas hepáticas en el hepatograma), entre otras, y también se puede asociar a enfermedades autoinmunes como diabetes tipo I, enfermedad de la tiroides, tiroiditis de Hashimoto, síndrome de Sjögren, entre otras.

Desde el Instituto Higía comentaron que ante la sospecha de la EC se solicitan análisis de sangre específicos llamados “anticuerpos”. Ellos tienen alto rendimiento diagnóstico del 95 por ciento y son dependientes del consumo de gluten por lo que no se debe indicar ni comenzar una dieta libre de gluten antes de la confirmación diagnóstica correcta.

Con anticuerpos positivos o ante alta sospecha clínica se realiza una endoscopía digestiva alta y biopsias múltiples del duodeno que confirmará la presencia de atrofia intestinal.

Una vida nueva
El único tratamiento hasta la actualidad es una dieta libre de gluten, es decir, excluir todos los alimentos que contengan trigo, avena, cebada y centeno y sus derivados (sin Tacc). Esta dieta requiere del asesoramiento y seguimiento por un especialista en nutrición para asegurarse una dieta equilibrada y el control de todos los productos envasados, ya que el gluten se utiliza en muchos alimentos para darle volumen a las preparaciones, aunque a simple vista no parezca que contienen gluten. La dieta debe mantenerse de por vida y ser estricta (100%, sin permitidos). Requiere un período de aprendizaje y adaptación a la situación clínica de cada paciente en particular.

Para diagnosticar correctamente, en el Instituto Higía cuentan con una sala de procedimientos donde se realizan las prácticas de videoendoscopias altas y bajas.

Los instrumentos utilizados por los gastroenterólogos Sartori, Luzuriaga y Royg son de alta calidad y, el equipamiento adquirido como la torre de endoscopia de alta resolución para la detección y estudio de lesiones milimétricas, brinda seguridad al equipo médico y a los pacientes a la hora de realizar el tratamiento.

Ante el contexto de emergencia sanitaria que atraviesa el mundo, se acondicionó y se adaptó todo el protocolo para brindar seguridad, por ejemplo, se distanciaron los turnos para reducir la cantidad de personas en la sede, todo el personal médico, asistente y anestesista cuentan con material de protección individual (barbijos, guantes, protector de calzado, camisolín y máscaras). También se implementaron rigurosos protocolos de desinfección en todas las áreas y en todos los equipamientos.

En la institución además se puede pedir una consulta con profesionales del área de endocrinología, anatomía patológica, ecografía, nutrición y cardiología. Debido a la circulación comunitaria del Covid-19 es necesario pedir el turno a través del whatsapp del instituto al 376 505-6619 o llamando al teléfono 4434631.